Adaptaciones metodológicas y pautas para llevar a cabo en el aula con alumnos hiperactivos

La educación debe consistir en dar a cada uno lo que necesita. Y esto sólo lo conseguiremos mediante las adaptaciones metodológicas. Gracias a ellas podremos tratar la diversidad en el aula, proponiendo actividades abiertas para favorecer la expresión de los distintos intereses, ritmos y formas de aprender. Todos los niños deben realizar todas las actividades propuestas por el profesor/a que les permita desarrollar al máximo sus capacidades.

En el caso de los alumnos hiperactivos, estas adaptaciones deben llevarse a cabo con especial cuidado. Tendremos en cuenta adaptaciones en diversos aspectos de los que conforman el día a día educativo, como son:

– El material del aula.

– La evaluación.

– Y, los elementos personales.

Para llevar a cabo unas correcta adaptación metodológica de los elementos materiales, debemos tener en cuenta que las adaptaciones que debemos realizar son: disponer las mesas en filas para que trabajen individualmente y eviten distraerse; los niños/as hiperactivos deben sentarse cerca del profesor/a, procurando no estar cerca de ventanas, de la puerta del aula… para no distraerse; en los pupitres debe estar sólo el material indispensable para la actividad a realizar; colocar a los niños/as con déficit de atención junto a compañeros que favorezcan el aprendizaje.

En cuanto a la evaluación, las adaptaciones deben ser: la evaluación será continua, sistemática y centrada principalmente en el proceso de enseñanza y de conducta. Debemos evaluar no sólo a los alumnos, sino también los
materiales, estrategias, profesor/a… implicando siempre al niño/a en la evaluación, potenciando así la auto evaluación, para que sea el verdadero protagonista de este proceso.

Y, finalmente, no menos importantes son las adaptaciones a los elementos personales. En este caso procuraremos controlar y sistematizar nuestra actuación en el aula, realizando siempre una evaluación lo más objetiva posible, así como tener cuidado con las expectativas, pues se suelen cumplir, tanto si son positivas como negativas. Nuestra actitud  siempre debe ser positiva hacia todos los alumnos, y en especial a aquellos que sufren alguna dificultad.

Además de todas estas adaptaciones curriculares, para trabajar mejor con los niños hiperactivos debemos seguir unas pautas que nos ayudarán a presentar las actividades que propondremos a los alumnos. Estas pautas son las siguientes:

1. Simplificar las instrucciones.
2. Evitar comentar conductas indicadoras de falta de atención a tareas u órdenes, debemos hacerles reflexionar sobre su forma de comportarse.
3. Pasear por la clase para ver qué hacen.
4. Ante alumnos/as lentos en la realización de tareas, es preferible bajar el listón de productividad.
5. Procurar que las actividades no sean largas.
6. Los cuadernos de actividades deben tener un formato sencillo, sin dibujos que no estén relacionados con la tarea.
7. Dialogar con el niño sobre sus trabajos, para asegurarnos de que lo ha comprendido.
8. Enseñar y motivar al niño/a para que aplique las autoinstrucciones a las actividades que resulten adecuadas para ello.